EL NUEVO GOBIERNO DEBE REAFIRMAR SU COMPROMISO CON LA SALUD Y LOS DERECHOS HUMANOS

Con motivo de la constitución del nuevo Gobierno, hito que esperamos sirva también para reactivar la dinámica propia de las Cortes Generales, específicamente la activación de las correspondientes Comisiones parlamentarias, MEDICOS DEL MUNDO ha querido elaborar un compendio de objetivos políticos inaplazables durante la nueva legislatura.

La convocatoria anticipada de elecciones generales en julio de 2023 supuso la paralización de varios procesos normativos muy necesarios, algunos de los cuales son una deuda pendiente desde hace años y ya habían sido aplazados por la urgencia de hacer frente a la pandemia de la Covid-19. De hecho, los efectos de esa crisis sanitaria, social y económica han hecho visible la pertinencia de determinadas reformas sanitarias y de otras políticas sociales.

España inicia ahora una nueva legislatura, con un contexto político complejo y polarizado, especialmente marcado por la necesidad de alcanzar acuerdos para asegurar condiciones de gobernabilidad y estabilidad durante los siguientes cuatro años. En este marco, Médicos del Mundo cree que los Derechos Humanos, especialmente el derecho a la salud, deben estar en el centro de la agenda política. Por ello, llamamos a quienes toman las decisiones políticas a ser capaces de negociar y acordar, con los presupuestos y la coordinación interinstitucional necesarias, para que las políticas de la salud, la igualdad y diversidad y la cooperación internacional puedan ser materia de grandes pactos de Estado que permitan avanzar.

Objetivos políticos inaplazables

MEDICOS DEL MUNDO desea trasladar al nuevo Ejecutivo, así como a los grupos parlamentarios, una batería de objetivos que deben conformar la agenda política durante los próximos cuatro años de legislatura. En concreto, el nuevo Gobierno español debería abordar las siguientes demandas para dar cumplimiento efectivo al marco internacional de Derechos Humanos, la Agenda de Desarrollo Sostenible a través de los ODS -particularmente de su Objetivo 3-, y el Derecho Internacional Humanitario.

1. Una política de cooperación internacional de calidad, ambiciosa y transformadora. Para ello es imprescindible: definir una hoja de ruta efectiva con objetivos anuales que asegure alcanzar el 0,7% de la Renta Nacional Bruta destinada a Ayuda Oficial al Desarrollo en 2030, incrementar los fondos destinados al sector salud hasta el 15% de la AOD y los fondos destinados a la acción humanitaria hasta el 10%, así como apostar por políticas coherentes que impulsen transformaciones profundas con un enfoque de desarrollo sostenible.
2. Una Política Exterior que permita a España desempeñar un papel activo en la comunidad internacional, que promueva el cumplimiento del Derecho Internacional Humanitario y de los Derechos Humanos, demostrando un firme compromiso con la igualdad de las personas.
3. Un Sistema Nacional de Salud Universal e integral, en el que se incremente la financiación, se refuerce la atención primaria de salud y comunitaria, se asegure el acceso universal a todos los recursos y servicios socio-sanitarios en condiciones de igualdad a todas las personas que viven en nuestro país.
4. Garantizar la igualdad de género y combatir todas las formas de violencia contra mujeres y las niñas (incluyendo la explotación sexual y la trata, la mutilación genital femenina y los matrimonios forzados, entre otras) a través del marco normativo español como una vulneración de sus derechos humanos, así como hacer frente a las posiciones y discursos negacionistas de la violencia de género.
5. Proteger y garantizar los derechos humanos de todas las personas migrantes impulsando la reforma de la normativa de extranjería y facilitando la regularización administrativa.

Iniciativas legislativas pendientes de retomar

Durante la legislatura anterior se iniciaron varios procesos normativos muy necesarios cuyo trámite se vio interrumpido por la convocatoria anticipada de elecciones generales. En algunos casos se trató de proyectos de ley o decretos impulsados por el Gobierno, y, en otros, de proposiciones legislativas impulsadas desde el Congreso. Iniciativas como el Proyecto de Ley por la que se modifican diversas normas para consolidar la equidad, universalidad y cohesión del Sistema Nacional de Salud, las modificaciones del Real Decreto 240/2007, de 16 de febrero, así como el Real Decreto 557/2011 de 20 de abril, el Anteproyecto de Ley Orgánica Integral contra la Trata y la Explotación de Seres Humanos o la Proposición de Ley Orgánica para modificar el Código Penal y Prohibir el Proxenetismo en todas sus formas, deben ser retomadas o reactivadas con urgencia durante esta nueva legislatura.

Además, es imprescindible garantizar la correcta aplicación y el adecuado desarrollo de otras normativas que fueron aprobadas en la legislatura anterior y que ya se encuentran en vigor, como la nueva Ley de Cooperación Internacional y la aprobación de un nuevo Plan Director, la Ley Orgánica de Garantía Integral de la Libertad Sexual, el Plan de Inserción Sociolaboral para Mujeres y Niñas Víctimas de Trata, de Explotación Sexual y para Mujeres en Situación de Prostitución (2023-2026), el Plan de Acción contra la Explotación Sexual en el Sistema de Protección a la Infancia, la Estrategia Estatal para combatir las Violencias Machistas (2022-2025) o el II Plan Nacional de Derechos Humanos.